En un contexto difícil por los efectos que ha dejado la pandemia, sumando los años de recesión con caída del PBI en el país, el Presupuesto 2021 aprobado el miércoles pasado por la Legislatura marca un sendero de esperanza hacia la recuperación económica y la generación de empleo.
La Cámara de Diputados del Chaco sancionó la Ley 3284-F, que establece el Presupuesto General de la Provincia para el ejercicio 2021: “Este instrumento que brindamos al Poder Ejecutivo, permitirá al gobernador concretar con mayor certidumbre y previsibilidad las políticas públicas y poner en marcha todas las acciones necesarias para el desarrollo con equidad”, destacó el presidente del Parlamento, Hugo Sager. En este sentido, valoró los consensos alcanzados entre los distintos bloques políticos para contar con un presupuesto en tiempo y forma, aprobado antes de la finalización del periodo ordinario de sesiones, respondiendo así a las expectativas de chaqueños y chaqueñas.
La normativa prevé un presupuesto de $174.209.528.700, distribuidos según las prioridades del Plan Chaco 2030: el 50,09% para servicios sociales de Salud, Educación y Desarrollo Social; el 14,33% para políticas de inversión y reactivación económica; 12,42% para municipios y el 13,09% para servicios de Seguridad y Justicia.
Con este instrumento, el Gobierno provincial apunta a fortalecer principalmente los sistemas de salud, el educativo y el de seguridad pública, poniendo énfasis en recuperar la obra pública como agente dinamizador de la economía provincial y promover inversiones para potenciar las 20 cadenas productivas de valor.
Cabe destacar que el presupuesto sigue los ejes definidos en el Plan Chaco 2030, de descentralización, agenda digital y reforma constitucional. Y se enmarca bajo las premisas de mejorar la calidad de vida de los chaqueños, implementar mecanismos de concertación de planes de acción territoriales y locales de desarrollo y mejorar la eficiencia social, territorial y económica de las inversiones.
Un superávit moderado
El Chaco, a partir de 2021, abandonará el déficit crónico que tenía desde hace varios años para “pasar a un superávit moderado, dando así la estabilización necesaria a la economía”, afirmó Sager.
Con este presupuesto, el Estado pretende alcanzar la meta del superávit fiscal primario y también del superávit fiscal financiero, considerados claves para construir un equilibro en las finanzas públicas provinciales. El condicionamiento para lograr este resultado fiscal está dado por la recuperación económica argentina, y ésta se encuentra íntimamente relacionada con la resolución de la pandemia mediante la provisión de una vacuna que implique “una nueva normalidad” con actividades productivas y de servicios abiertas en forma integral.
Fomento a la producción, industria y empleo
También, se hará fuerte énfasis en el fomento a la producción, la industria y el empleo, a través de 62 proyectos de inversión en los que se inyectarán $11 mil millones para generar 2.800 puestos de trabajo.
“El modelo agroindustrial propuesto contempla un fuerte respaldo a 20 cadenas productivas y al desarrollo de la economía del conocimiento como apoyos necesarios para la recuperación económica provincial”, detalló el legislador.
De esta manera, consideró que producción y empleo implican generar alianzas estratégicas entre el sector público y privado para consolidar un sendero de crecimiento, afianzando el patrón de agregación de valor a los recursos naturales. Esta premisa, sumada a la puesta en marcha de plantas que generen biomasa, energía solar y la llegada del gas natural, constituyen un escenario propicio para avanzar en consolidación de un Chaco productivo y sostenible.
Perspectiva de género
Por otra parte, rescató la incorporación de la perspectiva de género en la iniciativa, dotando de herramientas humanas, técnicas y logísticas a la aplicación de cada política pública destinada a prevenir, sancionar y erradicar las violencias hacia mujeres y disidencias.
El proceso de elaboración del presupuesto, en esta modalidad, se basó en una plataforma de trabajo que integró los aportes del Ministerio de Planificación y Economía, la Vicegobernación, la Secretaría de Derechos Humanos y Géneros, y la Dirección Nacional de Planificación, Seguimiento y Gestión de la Información, dependiente del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación; y los aportes realizados en la legislatura a partir del tratamiento en la Comisión de Hacienda y Presupuesto con las consultas realizadas a todos los sectores involucrados.
“Los esfuerzos se orientan a lograr que la ejecución de este presupuesto considere el impacto diferenciado de los recursos por diferencias de género y fortalezca el análisis presupuestario para identificar estas desigualdades a fin de reducir las brechas de género, prevenir y erradicar la violencia en todas sus manifestaciones”, subrayó Sager.
Fuerte inversión en Salud y Educación
“Es un presupuesto con perspectiva optimista, porque se enmarca en una pandemia que ha afectado en gran medida a nuestros sistemas educativo y de salud”, remarcó el titular de la Legislatura.
En este sentido, dijo que el presupuesto destinado a Educación contempla el avance en iniciativas legislativas orientadas a cambiar estructuralmente la educación rural, la educación técnica y de formación laboral, la estrategia de desarrollo de los procesos de formación docentes en los Institutos Terciarios y la aplicación de la jornada extendida, como factor necesario para una mejor calidad educativa.
También, se prevé fortalecer los centros de estudiantes, promover la participación de la comunidad educativa mediante la consolidación de consejos escolares, mantener y rehabilitar la infraestructura edilicia mediante el financiamiento de FONPLATA, transformar la legislación en la organización del sistema educativo y promover un sistema de evaluación justo y equitativo.
Se pretende, además, invertir en el mejoramiento de la estructura salarial de los docentes, luego de tres años de aguda recesión con una pandemia de por medio. No obstante, el gran desafío del Estado para el 2021 es lograr recuperar el poder adquisitivo del salario teniendo en cuenta el fondo educativo, la evolución de los recursos coparticipables y la variación de la canasta básica.
Respecto al presupuesto destinado al sistema sanitario, se contempla el seguro provincial de salud, el desarrollo del sistema de vigilancia epidemiológica con la articulación del programa de control de vectores y un sistema de fiscalización sanitaria con el fin de evaluar la calidad de atención.
El fortalecimiento de la salud provincial será posible por el aumento de los recursos para el sector, sobre la base créditos internacionales como el de FONPLATA que prevé la adquisición de equipamientos, mejoramientos de capacidades institucionales del sistema con más capacitación, y la mejora del ingreso salarial de trabajadores; e infraestructura edilicia adecuada. En esta línea, el aumento de recursos del presupuesto permitirá lograr un sistema sanitario fuerte y bien organizado con mejor calidad de servicios.
“La Ley de Leyes nos permitirá sortear la pandemia de una mejor manera posible para el año entrante, sin mayores colapsos en los ámbitos más sensibles de la provincia, asignando los recursos necesarios para el progreso y mejoramiento de la calidad de vida de los chaqueños y las chaqueñas”, concluyó Sager.