Ven con buenas expectativas el convenio firmado este miércoles para realizar las obras que permitan el control de la cuenca hídrica, histórica demanda del sector productivo.
Diversas entidades que nuclean la producción agrícola y ganadera del Chaco, así como instituciones industriales de la provincia, celebraron el convenio impulsado por el gobernador Jorge Capitanich junto a sus pares de Santa Fe, Omar Perotti, y de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, para el desarrollo del Plan Director Hídrico y la reactivación del comité interjurisdiccional de los bajos submeridionales.
La iniciativa viene a dar respuesta a una demanda histórica del sector productivo de las tres provincias, que debido a la falta de regulación de la cuenca hídrica, debe afrontar temporadas de sequías y anegamientos. Este acuerdo respaldado por el gobierno nacional busca ejecutar las obras necesarias que resuelvan definitivamente las problemáticas, generando además un prototipo de producción que potencie el desarrollo y garantice el uso racional y sustentable de los humedales.
“Venimos de 15 años de asistencias del Estado por anegamientos en el sudoeste, y el hecho de que tres gobernadores firmen un acuerdo para administrar un plan maestro que regule la salida total del agua es para celebrar”, dijo el presidente de la Federación Agraria del Chaco, Martín Spada, y remarcó: “Sabemos de la predisposición del gobernador Capitanich para alcanzar las cosas que necesitamos”.
Se trata de un “viejo anhelo”, consideró el presidente de la Federación Chaqueña de Asociaciones Rurales (Fechasoru), Daniel Fontana, que este miércoles por la tarde se preparaba para una nueva asamblea de la federación. “Si bien el saneamiento de los bajos submeridionales será un trabajo de largo plazo, tenemos las mejores expectativas de que se trabaje en serio durante estos próximos cuatro años”, manifestó el referente.
El acta compromiso para la ejecución de obras prioritarias a realizar en la cuenca incluye la obra hidrovial del canal interprovincial Santiago del Estero – Santa Fe, las defensas de las localidades de la zona, y el camino de vinculación de la ruta provincial N° 30.
Martín Spada señaló que “la refacción de la ruta 30 con la 95 para interconectarse con la 11 es una decisión clave”, y expresó que con más infraestructura y logística, más capacidad de producción podrá tener el sector en cada temporada.
También se prevé la adecuación de alcantarillas de caminos vecinales, de rutas provinciales y nacionales, así como el reacondicionamiento de rutas provinciales de calzada natural adaptadas hidráulicamente al funcionamiento del sistema.
Por su parte el presidente de la Unión Industrial del Chaco (UICH), Andrés Irigoyen, valoró el acuerdo afirmando que “las expectativas son muy positivas” también para la industria, entendiendo que todos los eslabones de la cadena productiva se verán beneficiados porque “al campo no le sirve vender productos sin valor agregado”.
En sintonía con la idea del federalismo, repetida en reiteradas ocasiones por parte de los mandatarios, Irigoyen aseguró que “se abren nuevas esperanzas”. “Queremos que los productores puedan sacar a producir sus máquinas, que aquellos otros que ven oportunidades de negocio puedan industrializar y darle valor agregado a su producción como dijo el gobernador Capitanich, que es lo que siempre pregonamos y por dónde entendemos que debe darse el desarrollo de la provincia y consecuentemente de la Argentina”, amplió el referente. “El Chaco y el país se están poniendo de pie porque hay un gobierno que entiende de las necesidades”, finalizó.
